sábado, 12 de septiembre de 2015




EQUIPO SALUD MENTAL SAAVEDRA


Enredados, un caso de adulteración filiatoria”

Dado nuestro trabajo con niños, consideramos interesante el análisis de dicho film relacionándolo, en este caso, desde el punto de vista de la adulteración filiatoria.

"ENREDADOS":
La película se basa en la historia de la conocida Rapunzel, la princesa apricionada en la torre caracterizada por su larga cabellera.  Lo esencial y adicional de la película se centra en los poderes mágicos del cabello de la princesa por los cuales es capturada por Madre Gothel, una bruja destacada por su egoísmo. Al descubrir que el cabello de la recién nacida cuenta con los poderes de una mágica flor dorada que rejuvenece y darse cuenta que al cortar un mechón éste perdía tales poderes, decide capturar a la niña, encerrarla y criarla en una torre alejada del reino. Su egoísmo y sobreprotección llegan a tal punto que le hace creer a Rapunzel que ella es su madre y que la vida fuera de la torre es sumamente peligrosa para una chica frágil e inocente. Sin embargo Rapunzel nunca perdía de vista las “linternas” que aparecían justo el día de su cumpleaños. Todos en el reino, comenzando por el Rey y la Reina, lanzaban luces flotantes en el aniversario de su nacimiento sin perder las esperanzas de encontrarla algún día. Mientras tanto ambos vivían en una profunda tristeza. Por su parte, Rapunzel sentía una gran fascinación las luces y al cumplir los 18 años decide expresarle a su madre su deseo por verlas de cerca. Su petición es tajantemente rechazada por Gothel. Ante esto, junto a la inesperada llegada de Flynn Rayder, un ladrón que vivía escapando del reino para no ser capturado por el robo de la corona de la princesa, Rapunzel decide despistar a su madre y escapar de la torre con la ayuda de Flynn. Poco a poco se observa cómo la confianza, seguida por el amor se van abriendo paso entre ellos, junto con situaciones que luego determinarán el final. Sin embargo, Madre Gothel enceguecida por su egoísmo, les tiende una trampa y una vez mas Rapunzel es presa de sus mentiras. A pesar de lo sucedido, Rapunzel, habiendo conocido el reino, de repente, encerrada nuevamente, algo de su verdadera identidad se pone en juego. Enfrenta a su “madre”  y de nuevo con la ayuda de Flynn, quien corta su cabello para que Gothel ya no pueda servirse de éste, regresa al reino para ser reconocida por el Rey y la Reina como su legítima hija.


Desde el punto de vista psicológico, podríamos preguntarnos ¿Qué consecuencias conlleva para la subjetividad de esa niña el hecho de haber convivido con sus padres biológicos por un tiempo y luego ser despojada de ellos? ¿Qué lugar podría ocupar para la “madre” apropiadora? Si es que podríamos llamarla madre. Y ¿Qué produciría en su subjetividad y en su constitución como sujeto ese “lugar” del padre? Un lugar vacio, quizás forcluido.


FARSA Y FICCION

Gutierrez, C. y Montesano, H. (2008) realizan una clara distinción entre farsa y ficción en relación a la posición de “apropiador” y “padre”. Desde una perspectiva psicoanalítica, tomando a Freud, se ubicaría a la ficción como una verdad subjetiva basada en mitos en los cuales se basa cada cultura a modo de simbolización de distintas temáticas referentes a lo propio del sujeto, como por ejemplo el complejo de Edipo. Es por esto que podría afirmarse a la realidad como una construcción sostenida en lo simbólico que da lugar  a que el sujeto pueda situarse y dar existencia al mundo. Dichos autores afirman que “esta fundación, sostenida en la palabra, otorga  a la realidad su carácter ficcional”.



En relación a esto podríamos preguntarnos ¿Qué implicancias conlleva para la constitución subjetiva de la niña tal apropiación? Teniendo en cuenta que la ésta indica un lugar en el discurso parental, esa forma discursiva adquiere la forma de una farsa. Por ejemplo, cuando Rapunzel le expresa a su madre su deseo por ver las luces de cerca, ésta responde racionalizando y restándole importancia al suceso, la trata de engañar explicándole que son las estrellas, también se puede observar en las justificaciones que inventa por las que no debe abandonar la torre.
Se trataría de una mentira sostenida por un Otro como testigo y garante de la verdad. Es decir, la manera en que Rapunzel conoce el mundo es a través de Gothel, y se encuentra mucho más acentuado en el hecho de que la salida al mundo exterior le esta denegada. Por lo tanto el discurso de Gothel podría adquirir una significación sumamente significativa para Rapunzel ya que esa “madre” es la única vía por la que ella sostiene ese mundo exterior y se sitúa simultáneamente en él. Ante la aparición de Flynn ella reacciona defendiéndose y atacándolo ya que su “madre” le trasmitía que las personas del mundo exterior son sumamente peligrosas, razón por la cual no debía salir de la torre. De este modo, los autores sostienen que el usurpador o secuestrador solo logra imitar algo irrepetible: ser un padre. Pero de esta forma, sólo logran adulterar y desdibujar dicha función. En Rapunzel, su filiación e identidad se encuentran totalmente falsificadas.
Por otro lado, Gothel se sitúa ante Rapunzel en un lugar de omnipotencia, esto se puede observarse en la canción que le canta cuando ésta le pide salir para ver las luces. Aquí algunos versos que considero pertinentes:
“¿Quieres salir de la torre?//Mírate, tan frágil como un brote/ /Sabia es mamá 
óyeme atenta: el mundo exterior es cruel/ /Hombres también, de largos colmillos// madre te protege, ¡mi consejo escucha ya!// mami es tu soporte, ¡sola no subsistirás!// Simple, sin calzar, inmadura, torpe... ¡Viva te comerán!
Se puede pensar que aquí pueden leerse los estragos del deseo materno en donde la presencia del “corte” se encuentra ausente. Donde la función paterna no tapona la voracidad del deseo materno. Volviendo al tema de la ficción, Gutierrez, C. (2000) afirma que si el Otro no presenta todo el saber, si está fallado, ésto es algo decisivo para el sujeto dado que si el Otro no tiene todas las respuestas el sujeto deberá buscarlas por sí mismo. Esa búsqueda estará determinada siempre por un saber supuesto, una ficción. Esto es lo que sucede, según Freud con las teorías sexuales infantiles. Asimismo, se podría ubicar a Madre Gothel en la misma línea que el Padre de la horda primitiva ya que se situarían como la ley en sí misma y no en tanto forma de transmitirla. Esto guarda relación con lo que llamaríamos la función paterna que plantearé a continuación.


¿QUE ES UN PADRE?, ¿QUE ES UNA MADRE?

Desde el punto de vista psicoanalítico, se podría decir que ser madre o ser padre no es homologable a la figura real y concreta de un padre “hombre” y una madre “mujer” sino que se agotan en meras funciones. La función materna, implica siempre la presencia de un deseo junto con la posibilidad de una renuncia. Renuncia que implicaría poder ceder ese hijo a la vida. En términos de Gutiérrez, C. (2000) una madre es “la que cede su objeto más preciado, la que por su castración se somete a la ley paterna en una renuncia del lado de la cultura”. A su vez, la madre marca con su lenguaje el cuerpo del niño y de esta forma lo libidiniza, ella le habla al niño en su propia lengua, Lalengua en términos lacanianos. Por otra parte, el padre cumple la función de interdicción de la ley. Esto no implica encarnar la ley sino que su función radica en la trasmisión de esa ley. Siguiendo con la perspectiva de Gutiérrez, C., “no se trata de ser padre, sino de oficiar de padre”.  Según lo observado en el film, podría pensarse que Madre Gothel no ocupa el lugar de “madre” de Rapunzel por varias razones. Por un lado, no se observa allí la presencia de un deseo de tener un hijo sino más bien un anhelo que giraría en torno a la demanda la cual ubicaría a la niña como objeto en donde el único fin sería utilizar su largo cabello mágico para poder rejuvenecer. Por otro lado, no habría allí una renuncia que funcione a modo de corte entre Gothel y la niña, tal es así, que ni siquiera le estaba permitido bajar de la torre. Por lo tanto ambas funciones, materna y paterna, no logran ser encarnadas por el personaje de Gothel, quedando así, Rapunzel, ante los estragos del deseo materno. Sin embargo, se podría pensar a Flynn como agente externo que viene a cortar esa relación simbiótica entre “madre-hija”, ayudando a Rapunzel a escapar de la torre y luego, al final del film, al cortar su cabello. Podría pensarse a esta acción, en términos lacanianos como un corte en lo real ya que produciría una separación real entre Rapunzel y Gothel. Al cortar el cabello, éste pierde sus poderes y automáticamente Gothel envejece y muere.



EL DERECHO A LA IDENTIDAD

Por su parte, Lo Giúdice, A. y Olivares, C. (2006) destacan que “si la lengua crea el parentesco, ser secuestrado y apropiado es ser despojado del contexto familiar, donde el pequeño sujeto se prende a las marcas singulares de la lengua”.



 Esto es lo que sucede en el film seleccionado. Rapunzel fue despojada de su seno familiar, del cual se le dio una determinada identidad. Gothel la desojó tanto de su identidad, de la niña que debió ser, como de su historia y del deseo con el que la esperaban. Sin embargo podríamos preguntarnos ¿qué sucede con el tiempo en que Rapunzel vivió con sus padres biológicos? Si bien no es posible saber qué edad tenia al momento de la apropiación, sí se podría afirmar que esos padres fueron los que nombraron a la niña y le dieron un lugar. Sí se podría afirmar, también, que fue de ellos de quienes recibió una marca simbólica, un trazo identificatorio que le permitirá constituirse como sujeto. Puede observarse a lo largo del film como esto insiste en aparecer en todas las situaciones vividas por Rapunzel fuera de la torre, en busca de las luces, o, si se quiere, en busca de su identidad. Su deseo por ver de cerca las luces podría estar relacionado con un deseo inconsciente de querer encontrar su verdadero origen ya que la visión de las luces desde su ventana cada día de su cumpleaños habrían movilizado la búsqueda de su identidad. Esto puede observarse con la frase “Siento que son para mí”. Se presenta algo del inconsciente que la lleva a buscar su verdad. Pero a su vez, también esa apropiación ha dejado sus marcas y podría decirse que fue en esa “farsa” en donde Rapunzel pudo inscribirse en lo humano y constituirse como sujeto deseante. Sin ese deseo que la movilice quizás nunca hubiera podido salir de la torre. Esto da lugar a poder pensar que no todo fue devorado por el deseo materno, algo allí quedó como resto que posibilita el surgimiento de un deseo.


¿RESTITUCION?

Se podría pensar a la apropiación de Rapunzel como un “atentado filiatorio” en términos de D’Amore, O. (2008) distinguiéndolo de un “crimen filiatorio” ya que se puede observar una restitución simbólica en tanto Rapunzel se interpela y esto hace que pueda responder ante esa verdad sobre su existencia. Lo hace desde una posición ética ya que el acto de volver al reino implica responder por su deseo. En busca de éste regresa al reino y decide ser quien es y dejar de ser la “princesa perdida” para ser reconocida como “La princesa”, hija del rey y la reina. Podríamos pensar que se trata de una “situación dilemática” (Domínguez, M.E. 2013)  ya que se trata de una decisión que tiene que tomar en donde el universo regido por las leyes de Gothel en este caso ya no le sirven, deberá regirse por sus propias leyes y ahí radica la singularidad en situación y su responsabilidad. De este modo, podría hablarse tanto de una restitución legal como simbólica ya que puede haber una subjetivación de la restitución. Sin embargo, podríamos preguntarnos ¿qué consecuencias conlleva para esa niña haber sido criada en base a una farsa? ¿Qué marcas acarrea para la constitución como sujeto?




Según Kletnicki, A. (2000) “las marcas allí trasmitidas (…) no son falsas ni son verdaderas: son reales”. Sin embargo, considero que lo que sucede en Rapunzel es que a pesar de estas marcas reales, algo de la eficacia de lo simbólico se ha podido conservar. Esto da lugar a un posible cuestionamiento y quiebre sobre el universo construido durante el tiempo de la apropiación y abre las puertas a la posibilidad de que Rapunzel pueda construir una historia distinta a la que le fue impuesta durante la apropiación. Se trataría de la construcción de un saber, saber sobre su identidad. Para esto será necesaria la aparición de un suceso inesperado que “mueva al sujeto a interrogarse en el intento de producir un saber sobre el pasado que dé comienzo a lo que hasta ese instante no ha obtenido lugar”. Kletnicki, A. se refiere a un encuentro con los agujeros de la memoria, “esa otra realidad que se le cuela por las grietas”. Se trataría de ese inconsciente que insiste en aparecer. Esas marcas que dejaron huella durante el tiempo vivido con sus padres biológicos. Esto puede observarse en la escena en donde se le presentan visiones sobre un símbolo característico del reino, los soles, y a su vez, recuerda imágenes de algunas situaciones vividas durante el viaje hacia las luces y un recuerdo de su infancia de cuando sus padres la alzaban en brazos. En ese momento, sale repentinamente de su habitación para enfrentar a su “madre” y dice: “El mundo no es como tú dices y yo no soy lo que tú piensas”.


CONCLUSION

Se podría concluir pensando que más allá de una posible restitución, ésta nunca podría ser considerada en forma total ya que siempre quedarían las marcas que dejaron huellas simbólicas como consecuencia de la apropiación. Si llevamos este caso a la realidad y dejamos por un momento de lado su tinte infantil, si este caso hubiera pasado por la justicia, podría decirse que siempre algo queda por fuera en cuanto a la interpretación de la leyes, allí debería caber la posibilidad para la emergencia de la responsabilidad subjetiva, para la decisión del sujeto en cuanto a si desea o no responder por su identidad o seguir viviendo una falsa realidad. Tal como nos dice Kletnicki, A. en Niños desaparecidos en Argentina: lógica genocida y apropiación legal: “(…) la posibilidad de restituir la identidad queda subordinada (…) a la decisión previa de quien ha sido apropiado ilegalmente: el sujeto deberá desear saber, tendrá que poder cuestionar sus certezas y pronunciarse sobre el recorrido a seguir”. Volviendo al film, Rapunzel elige responder por su deseo y esto la lleva a responder por quién es, por su razón de ser.




El sujeto es siendo (…) de eso debería dar respuesta, de su razón de ser deseante

Mosca, J.C. (1998)



Lic. María Eugenia Ramundo


No hay comentarios:

Publicar un comentario